TIEMPO
DE FE Y ESPERANZA EN LA PALABRA DE JESUS
Amadísimos
hermanos no perdamos la esperanza en la palabra de Jesús en tiempos turbios.
Hace unos días comenzamos este camino que nos lleva a la
pascua con gran sinceridad, con esperanza de hacerlo mejor que los años precedentes, celebrar con júbilo la fiesta de la luz por antonomasia (la Pascua de
Resurrección) y poder salir a la calle con nuestras cofradías. Sin embargo,
vemos que este año, a causa del COVID-19, haremos todo en casa, desde la serenidad
de los confinamientos enraizados en la Palabra del Señor y en la esperanza de
sus maravillas, porque todavía no ha llegado el fin del mundo como lo vaticinan
los profetas “circunstanciales”.
Pero
en medio de estas dificultades, el profeta Isaías nos pregona que Dios va a
“crear un cielo nuevo y una tierra nueva donde no habrá llanto sino alegría”. Las
palabras de Isaías en estos momentos tan difíciles son como un jarro de agua en
el desierto, porque nos infunden esperanza, coraje y serenidad. Nuestros
llantos, lagrimas, oraciones fructificaran si nos adherimos y creemos en la
palabra de Jesús, sin intereses efímeros; como lo hizo el funcionario real en
el evangelio de Juan 4,43-54.
Estos momentos difíciles, podemos dudar de la
existencia de Dios, pero no olvidemos que Él está ahí para transformar nuestras
lágrimas en vida.
Fr.
Esteban Nko, OP
Salmo: "He proclamado tu salvación ante la gran asamblea; no he cerrado los labios, Señor, tú lo sabes. Aquí estoy para hacer tu voluntad.”
Oración: "Te rogamos, Señor, que venga en nuestra ayuda la intercesión poderosa de la Virgen María, para que nos veamos libres de todo peligro y podamos vivir en tu paz."
Evangelio:
San Lucas 1, 26-38.
Música para el camino:
"Hágase" de Ain Karem
"Hágase" de Ain Karem