Viviendo en oración el Adviento desde Scala Coeli
Antífona
El Señor llegará sin retrasarse,
él iluminará lo que esconden las tinieblas
y se manifestará a todos los pueblos.
Oración
Concédenos, Señor todopoderoso, que la fiesta ya cercana del nacimiento de tu Hijo nos reconforte en esta vida y nos obtenga la recompensa eterna.
Reflexión
Desde la Casa de Nazaret, el hermano Antonio Molina, reflexiona con nosotros en este día de Adviento en el que recordamos la memoria de San Juan de la Cruz.
“El Señor me hace desbordar de gozo, y mi Dios me colma de alegría” (IS. 61, 10).
Adviento es tiempo de espera, de una espera gozosa. En esa espera nos preparamos a la llegada del Señor Jesús, con la oración, el silencio interior (a pesar del bullicio exterior) y las buenas obras, para que Cristo nos encuentre con la lámpara encendida y dispuestos.
La alegría arraigada en la esperanza de la venida de Jesús se expresa en la afabilidad con los otros, en la mansedumbre, en el esfuerzo por lograr la medida justa con cada hermano que encuentro.
“La sabiduría entra por el amor, silencio y mortificación. Grande sabiduría es saber callar y no mirar dichos, ni hechos, ni vidas ajenas. (San Juan de la Cruz).
¡¡ VEN, SEÑOR JESÚS !!
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