“Creemos que has venido de Dios”
Jn 16,29-33
Aunque son más las veces que dudamos. Dudar y creer son las dos caras de la misma moneda. Pero uno elige con cual quedarse, aunque la otra siempre ande amenazando. Creemos porque nos han enseñado a hacerlo personas creíbles. Creemos porque pequeños signos nos empujan casi irremediablemente. Creemos por infinidad de experiencias que nos han dado pistas. Pero no se cree de una vez para siempre. Creer es renovar la fe a diario, volver a intentarlo, ponerse el camino. Creer en las personas, en Dios, en la vida, en el futuro, en mí mismo y en mis sueños… es una decisión para defender durante toda la vida. Y creer sirve para mucho. A Jesús y a los discípulos para “vencer al mundo”. Para nosotros sigue siendo una opción de felicidad y de sentido. Porque creer –aunque no esté de moda- es una experiencia de sentido como ninguna otra… En el día de hoy, vuelve a intentarlo: ¿en qué, en quién quieres renovar tu fe? Que el Resucitado, tan cercano siempre, te empuje a seguir eligiéndolo a Él en todo.
Dios mio, quiero que me aumentes mi fe, que siempre este en camino, aunque tenga una parada.
ResponderEliminarCuantas veces dudo y te pido mediaciones, pero cuantas veces me las regalas sin yo pedir.
Que tenga ese Espírtu para seguir intentándolo.