Consuelo de los migrantes
Madre Inmaculada
que los hombres y mujeres de todos los tiempos
reciban en sus países a los hermanos que llegan.
Y reciban en nuestra tierra,
el calor de nuestros techos
y la seguridad del trabajo
para que vivan y sean personas dignas.
Hombres y mujeres que a pesar de su dolor
también son hermanos nuestros.
Consuelo de los migrantes y refugiados,
concédenos a los mujeres y hombres de este mundo
ser verdaderamente capaces de Dios.
Amén
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