Hoy haremos una breve referencia del Beato Francisco de Posadas, OP.
Fr. Pedro de Alcalá, confesor y biógrafo del P. Posadas, lo define como un dominico criado en el seno nutricio de Scala Coeli, tallado a la medida y a la plenitud de sus modelos y predecesores en dicho convento, como fueron S. Álvaro y Fr. Luis de Granada.
El primer contacto de Francisco de Posadas con Scala Coeli se produce como consecuencia de serle negada su admisión en el convento de S. Pablo. Ante ello, escribió una carta al prior de Scala Coeli, ya que en dicho convento no se miraba tanto la hidalguía de la sangre y la condición social de las familias, como se hacía en el de S. Pablo, cuanto la hidalguía del alma.
Francisco de Posadas fue aceptado en dicha comunidad de Scala Coeli, le fue puesto el hábito dominico el 22 de noviembre de 1662 -convirtiéndose ya en hijo de Scala Coeli-, y fue enviado a hacer el noviciado a Jaén. Una vez finalizados estos estudios y ser ordenado sacerdote, el Padre Posadas vuelve a Córdoba, celebrando su primera misa en el santuario de la Fuensanta. Tras ello, y con la fama adquirida de excelente predicador, el P. Posadas volvió a Scala Coeli.
Con posterioridad fue destinado al Hospicio de Scala Coeli en Córdoba (pequeña hospedería construida por San Álvaro para descanso de los frailes cuando bajaban del convento a Córdoba o para pernoctar cuando el mal tiempo no les permitía subir a Scala Coeli), ejerciendo como vicario, confesor, guía de almas y recolector de las limosnas que se recibían para el sustento del convento, siendo desde ese momento conocido popularmente como el “Hospitalico del P. Posadas”. Desde dicho hospitalico, y sin olvidar en ningún momento “su” convento de Scala Coeli, realizó una ingente y reconocida labor de apostolado entre los cordobeses de todo tipo y condición social.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comparte con nosotros...