OCTUBRE, LOS MISTERIOS DE CRISTO en esta Casa de Oración

       

       Santo Domingo de Scala-Coeli * Dominicos * Córdoba

OCTUBRE, LOS MISTERIOS DE CRISTO

en esta Casa de Oración

Una herencia de siglos nos ofrece argumentos para cada mes del año con la pretensión de fijar la atención del creyente y facilitar su comunicación orante con Dios Padre. Y en este sentido, el mes de octubre nos viene marcado por la advocación del Rosario que adorna a María de Nazaret.

En las mejores páginas de la predicación de nuestra Orden, desde sus orígenes, y cuando los que habían recibido la palabra del predicador, preguntaban acerca del modo y del contenido de la oración y contemplación del pueblo fiel respecto a Dios Padre, el predicador indicaba que la mejor expresión de la oración cristiana no podía ser otra que la misma persona de Jesús de Nazaret, como protagonista de la más bella historia que hemos relatado Dios y los hombres a dúo salvador. Así entendido, las palabras, gestos y hechos de Jesús de Nazaret es la mejor colección de voluntades amorosas de Dios Padre con todos nosotros sus hijos.

Que, con el paso del tiempo, se haya fijado la atención bien en el rezo de la Iglesia o en la sarta de cuentas que responde al nombre de Rosario, es otra cuestión que no debe ocultar su primer sentido evangélico. Por ello, y respetando no sólo la tradición eclesial sino, sobre todo, la forma de rezar de la gente más sencilla, llamamos la atención sobre algo elemental y, al tiempo, muy de hondura evangélica: que Cristo Jesús, Palabra viva que compartió nuestra existencia con voluntad salvadora, es, debe ser, el contenido mejor de nuestra oración, meditación, contemplación y predicación, porque, nadie mejor que él, nos pone en el dial de un Dios Padre, todo bondad con nosotros. Por descontado que María, el mejor seno de la Palabra, se presta toda para que nos centremos en su Hijo, no en ella: Haced lo que él os diga (Jn 2,5).

      1.      Misterios de Gozo                      

                    ·         Anunciación de María

                         María visita a su prima Isabel (Magnificat)

                   ·         Nacimiento de Jesús de Nazaret

                   ·         Presentación de Jesús en el templo

                   ·         Jesús perdido y hallado en el templo

2.      Misterios de Luz

·         Bautismo de Jesús en el Jordán

·         Primer signo salvador: las bodas de Caná

·         Anuncio del reino, llamada a la conversión

·         Transfiguración

·         Eucaristía, sacramento pascual

3.      Misterios de Dolor

·         La oración en el huerto

·         Flagelación de Jesús

·         Jesús es coronado de espinas

·         Jesús con la cruz a cuestas

·         Muerte en la cruz

4.      Misterios de Gloria

          ·         Resurrección de Jesús

          ·         Ascensión a los cielos

          ·         El Espíritu Santo

          ·         Asunción de María

          ·         María reina de los cielos.

AVE MARÍA

(Víctor Manuel Arbeloa)

Dios te salve María,
Por la luz de la luz transfigurada.
Dios te llena y te guía
Y el fruto de tu vientre en tu mirada.
Dios te salvó, María.
Te llenó de su fuerza complaciente,
como el fuego del sol llena la aurora,
como el agua la fuente.
Maduró con su luz y su ternura
El fruto de tu amor y de tu vientre.

Santa María,
hija del pueblo,
madre paciente,
fiel, generosa,
pobre y rebelde...

Míranos peregrinos, vacilantes,
cultivando este viejo paraíso,
caminando hacia tu cielo lentamente.

No queremos cansarnos de este mundo,
ni buscamos un refugio celeste.
Pero tú no te canses
de mostrarnos la meta, los caminos,
ahora y siempre.