Los novicios, a través de una carta escrita antes de la celebración, expresaban sus sentimientos, su gratitud y sus peticiones con estas palabras:
"Sentimos una inmensa alegría, emoción y por supuesto nos percatamos de la responsabilidad que conlleva vestir el que sentimos ya nuestro hábito. De forma tal que podamos hacer nuestros algunos versos de fr José María Guervós Hoyos OP:
“…Yo tengo un hábito blanco
como una vida que empieza,
que por amor a la muerte
se cubre con capa negra…”
Gracias por acogernos y hacernos sentir que somos un regalo de Dios para la Orden, gracias por ofrecernos la mejor formación posible que es la que nos ayuda a crecer en la confianza y felicidad de Domingo, gracias por permitirnos el honor de vestir el hábito de la Orden de Predicadores. Queremos pediros una cosa, solo una: Que oréis. Orad para que seamos fieles al compromiso que adquiriremos ese día, es decir, vestir el hábito y lo que eso conlleva. Orad para que siempre trabajemos en la verdad, por la verdad y para la verdad. Orad para que nuestra vida, la que queremos trascurra en la Orden de Predicadores, sea una hermosa sinfonía en honor de la verdad, es decir de Jesucristo y su Evangelio, al estilo que Domingo de Guzmán fundó hace 800 años".
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comparte con nosotros...